Estamos en Semana Santa y como manda la tradición hay que abstenerse de comer carne ciertos días. Así que aquí dejo una receta sencilla de pescado, un rodaballo al horno delicioso, acompañado con unas patatas a lo pobre. Esta receta también se puede elaborar con lenguado.
INGREDIENTES:
1 rodaballo,
100 ml de vino blanco,
2 dientes de ajo,
perejil,
1 guindilla,
aceite
sal.
Para las patatas:
600 gr de patatas,
2 pimientos verdes
una cebolla mediana.
Precalentar el horno a 200 ºC. Mientras tanto preparamos las patatas: Pelamos y lavamos las patatas y las cortamos en rodajas finas. En una sartén con un poco de aceite echamos las patatas y las freímos hasta que estén un poco doradas. En ese momento añadimos la cebolla en juliana y el pimiento verde en tiras. Sazonamos y freímos hasta que esté todo dorado y tierno. Reservamos.
Mientras que se hacen las patatas vamos preparando el rodaballo, que es de suponer que ya lo traes limpio de la pescadería. Untar el fondo de una fuente de horno con un poco de aceite. Echarle sal al rodaballo por ambas caras y colocarlo en la fuente. Pincelar por encima con aceite el pescado e introducirlo en el horno, ya caliente, y cocer durante 15 minutos. Pasado este tiempo, abrir el horno y verter sobre el pescado el vino blanco. Cerrar de nuevo y cocer 15 minutos mas. Pasado el tiempo de cocción apagar el horno y sacar el pescado. Colocarlo en una fuente con las patatas alrededor. Poner 3 cucharadas de aceite a calentar en una sartén. Pelar los ajos y picarlos en trocitos pequeños. Echarlos en la sartén y dorarlos junto con una guindilla picada también. Cuando estén dorados los ajos, apartar la sartén del fuego y echar el perejil picado, removerlo un poco con cuidado de que no se queme el perejil y echar el aceite rápido sobre el rodaballo. Servir caliente.
Yo utilicé medio rodaballo porque la pieza entera era muy grande, pesaba 3 kilos y solo estábamos 2 personas para comer, de ahí que en las fotos salga la mitad nada mas.