No tienen nada que ver con los croissants que todos conocemos pero quedan supertiernos y buenísimos de sabor. Una buena opción para preparar en casa, una vez que los pruebes no vas a poder dejar de hacerlos.
Ingredientes para 16 unidades aprox:
500 gr de harina de fuerza o de repostería
250 gr de leche
25 gr de levadura fresca
100 gr de azúcar (60 gr azúcar normal + 40 gr de azúcar invertido)
2 huevos
60 gr de mantequilla a temperatura ambiente
1 sobrecito de azúcar avainillado
un poquito de sal
Para pintar: un poco de leche mezclada con azúcar
Elaboración:
Poner la leche, el azúcar y la levadura en el vaso y mezclar 1 min/37ºC/vel 2. Añadir la harina, el azúcar avainillado, los 2 huevos, la mantequilla y la sal y mezclar 30 seg/vel 6.
Amasar 3 min/vel espiga. Dejar reposar la masa dentro del vaso o sacarla del vaso sobre la encimera espolvoreada con harina para que no se pegue, hacer una bola con la masa y ponerla en un bol untado con aceite y tapado con film transparente hasta que la masa haya doblado volumen.
Cuando haya levado amasar de nuevo para desgasificarla y cortar la masa en dos partes iguales. Formar una bola con cada masa y estirar en forma de circulo de unos 30 cm de diámetro. Dividir la masa en 8 porciones triangulares. Enrollar cada porción desde la parte mas ancha hasta la mas estrecha, dando forma al croissant. Colocarlos en una bandeja cubierta de papel de horno y taparlos con un paño. Repetir la operación con la otra mitad de la masa. En total salen 16 croissants. Dejarlos reposar hasta que doblen volumen.
Precalentar el horno a 200ºC. Mezclar un poco de leche con azúcar y pintar la superficie de los croissants, espolvorearlos con azúcar al gusto y hornearlos durante 15 - 20 minutos o hasta que estén dorados. Sacarlos del horno y dejarlos enfriar sobre una rejilla.
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