EMPANADILLAS

Si os gustan las empanadillas caseras y hacéis éstas seguro que repetiréis. Quedan igual que las que se compran en las panaderías. Son fáciles de hacer y las puedes rellenar con lo que quieras. Yo he optado por el clásico relleno de pisto con atún y huevo cocido.

INGREDIENTES:

500 gr de harina
200 gr de mantequilla
1 cucharadita de sal
1/2 botellín de cerveza muy fría de la nevera (100 ml aproximadamente)
3 yemas de huevo
1 huevo para pintar.

Sacar la mantequilla del frigo y dejarla a temperatura ambiente hasta que se ablande. Poner en un bol la harina y la cucharadita de sal y añadir la mantequilla a temperatura ambiente cortada en dados. Mezclar con las manos hasta que la mantequilla se integre con la harina, quedará una textura granulosa. Añadir las yemas de huevo, mezclar y verter en la masa la cerveza muy fría de la nevera. Amasar en el bol para que quede todo bien mezclado y pasar la masa a una mesa o superficie de trabajo. Amasar con las manos enérgicamente hasta que quede una masa compacta y lisa. Formar una bola con la masa y ponerla en un cuenco, taparla con film y dejarla reposar una hora en el frigo.
Pasado el tiempo coger la masa y estirarla con el rodillo hasta dejarla fina. Con un cortapastas redondo o un aro de cocina cortar la masa, poner una cucharadita de relleno y cerrar las empanadillas sellando el borde presionando con los dientes de un tenedor.
Precalentar el horno a 180ºC. Colocar las empanadillas en una bandeja de horno cubierta con papel vegetal y pintarlas con huevo batido. Meterlas al horno precalentado a 180ºC y dejar cocer hasta que estén doraditas. Si no se van a consumir todas de una vez podemos congelarlas recién hechas una vez que estén frías. Igualmente están buenas pasados un día o dos.